VERSOS HUMORÍSTICOS:

Es riquísima la chicha

De nuestra amada nación;

Produce gran regocijo

Y exige repetición.

El  bocadillo Veleño,

Es de agradable sabor;

Lo venden en todas partes

Y cautiva por su olor.

Mi mujer es muy jodida,

Yo no lo puedo negar;

Cada vez que se embejuca

Le da por amenazar.

Cuando estaba pequeñito

Quería siempre besar;

Como estoy ya muy viejito,

Sólo me agrada rezar.

Yo tengo una noviecita

De cuerpo espectacular,

Que no deja que me acerque

Si mi intención es besar.

Por los años que ya tengo

Yo me encuentro muy cansado;

Sin embargo reconozco

Que estoy bien enamorado.

A mi joven morenita

Yo jamás podré olvidar,

Porque es radiante y hermosa

De misterioso mirar.

En una plaza de toros

Me senté a gritar ¡olé!;

El toro casi me coge

Y desbaraté el ¡culé!.

Me enamoré ciegamente

De una chica muy querida;

Como soy hombre casado,

La conquista está jodida.

Le reventé la vejiga

A mi compadre José;

Como está muy delicado

Al hospital lo mandé.

Un amigo bien vestido,

De nombre Zoilo Botero,

Se lo pasaba tomando

Sin que tuviese dinero.

Yo vivo pensando en ti

Y tú no piensas en mí;

Es mejor que tú te mueras

Y no sufriré por ti.

Me encontré con don Vicente,

Sentado junto a la playa;

Estaba con bella chica

Cuando le picó una taya.

La bullita de los niños

Es algo muy especial;

Es un don que Dios ha dado,

A la infancia universal.

El ¡tic, tac! de los relojes,

Arrulla siempre a la tía,

Que se duerme con el ruido

Y se despierta de día.

El silbido de los hombres

Es algo tan especial,

Que el más bobito animal,

Bien entiende esa señal.

Los estudiantes mediocres

Quieren aprobar el año,

Sin trabajo y sin esfuerzo,

Sabiendo que esto es engaño.

Son muchas las invitadas

Y pocas las escogidas;

Trabajan con entusiasmo

Si anhelan ser preferidas.

Si el profesor es blandengue

No puede el triunfo alcanzar;

Es necesario que cambie

Su mal manera de actuar.

El perrito de Pascuala

Era el terror del lugar;

Mordía con gran furor

Al que quisiera pasar.

Doña Pascuala lloraba

Porque su perro murió;

Alguno de los vecinos

A su perro le mató.

Una joven vanidosa

Hacía alarde de belleza;

En un concurso efectuado

Se le acabó su certeza.

Hay deberes compartidos

Entre alumnos y docentes;

Buen ejemplo y gran respeto

Son virtudes permanentes.

La hipocresía produce

Un profundo malestar;

La sinceridad genera

Respeto y cordialidad.

Merecen un gran aplauso

Los alumnos aplicados,

Que con firmeza y constancia

Logran buenos resultados.

Ninguna materia es mala;

Todas tienen la misión

De fomentar el progreso

Y engrandecer la nación.

Dos novios se ven de noche,

Muy cerca de la dehesa,

Besándose con ardor

Hasta perder la cabeza.

Cuando se iza la bandera,

Todos debemos cantar

El Himno de nuestra Patria,

Con emoción singular.

La nueva Constitución

Tiene cambios nacionales,

Con mejores horizontes

Para los grupos sociales.

El profesor que es estricto

Ve a sus alumnos vencer;

Sin embargo no exagera

Porque no quiere perder.

Niños, jóvenes y ancianos,

Para la paz alcanzar,

Deben ser muy solidarios

Y por la patria luchar.

En pleno mundial de fútbol

Nos hicieron estudiar;

Alumnos y Profesores

Nos pusimos a llorar.

En los mundiales de fútbol

No se debe trabajar;

Exigimos vacaciones

Para el deporte admirar.

Ante muy justa protesta

Hubo buena solución;

Se suspendieron las clases

Y empezó la animación.

Con natural alegría

Yo les abrí el gran portón,

Pensando que se podía

No regresar al salón.

Muy felices nos pusimos,

Alumnos y profesores,

Porque con esta medida

Fuimos todos ganadores.

El fútbol es disciplina

De mucho interés mundial,

Que fortalece y alegra

A la juventud actual.